2017 no fue un buen año para mí. De repente, todo lo que había ganado con esfuerzo y voluntad se desmoronó. Y cada vez más. Hasta que prácticamente no quedó nada.
He estado apunto de tirar la toalla varias veces, pero sé que voy a seguir. Tengo que seguir. La lectura siempre me ha acompañado y me ha ayudado cuando estaba triste y agotada, es por eso que quiero volver al blog.
Ahora que estoy tomando medicación para superar mi depresión y mi ansiedad creo que es una buena idea intentar volver al blog, que tan feliz me hizo en su momento.
La razón por la que dejé el blog es la siguiente: llegó un momento en mi vida en el que fui incapaz de escribir. Las palabras se me atragantaban, simplemente no podía. Era horrible, y aún ahora ( que puedo decir con orgullo que pasito a pasito estoy superando esta depresión) solo me salen frases inconexas y no llega al grado de perfección al que aspiro. Pero no voy a rendirme. Estas son mis palabras, aunque sean malas o no tengan sentido.
Voy a intentar seguir escribiendo, por mí y para mí misma. Para desahogarme y compartir las lecturas , porque creo que de alguna manera, nos salvan la vida a todos.